Como recibir el bautismo del Espíritu Santo

Primero debemos saber que es el Espíritu Santo, luego para recibirlo debemos saber como buscarlo.
El Espíritu Santo es Dios mismo, manifestándose en Espíritu aquí en la tierra a sus hijos, recordemos que Dios se manifiesta como Padre, Hijo y Espíritu Santo, y trabaja de estas 3 maneras (1 Juan 5:7), los 3 tienen diferentes personalidades, pero es el mismo y único Dios haciendo todas las cosas.

Ahora sabiendo que o quien es el Espíritu Santo, ya podemos buscarlo porque sabemos quien es.
Podemos numerar 3 requisitos fundamentales para recibirlo.

1. Por Creer en el Evangelio
Gálatas 3:2; 6; 9; 11; 13
El Apóstol Pablo en sus cartas les llamaba la atención a los Gálatas diciendo:
Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe?
Esto solo quiero saber de Ustedes: ¿recibieron el Espíritu Santo por obedecer la ley de Moisés, o porCreeren Cristo Jesús o en el evangelio de Cristo Jesús es lo mismo.
Aquí el Apóstol está diciendo que el Espíritu Santo se recibe por creer en Cristo Jesús o en el evangelio de Cristo Jesús, es lo mismo.
Esa palabra "Oír con Fe" Significa que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios, o El evangelio (Romanos 10:17)

Podemos ver el Ejemplo de Abraham, ya que así iba a ser en el futuro la salvación y el recibir la promesa de Dios, por fe.

6 Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia.
Creyó a Dios, que es distinto de creer en Dios, mucha gente cree en la existencia en Dios, pero dice que Abraham creyó a Dios, o seacreyóa la promesa y obedeció.

9 De modo que los de la fe son bendecidos con el creyente Abraham
Podemos ver que las bendiciones se reciben por fe,por creer.
La fe es el evangelio, el evangelio es La obra redentora de Jesucristo en la Cruz del calvario, La manifestación gloriosa del Espíritu Santo y los dones Espirituales, el cambio de vida, la transformación, la manifestación del Espíritu Santo en los corazones de las personas todo eso es el evangelio.

11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá;
La ley de Moisés es espiritual y el que no la cumple se convierte en maldición, Cristo Jesús nos redimió de la maldición, El justo porcreer, obedecer el evangelio vivirá, se justificará y se salvará.

Efesios 1:13; 14
13 En Él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en Él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,
Dice el Apóstol que por habercreídoen Cristo, fueron sellados o Bautizados con el Espíritu Santo de la promesa (Joel 2:28)

14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
El Espíritu Santo es la garantía que tenemos de Dios de que nos dará la herencia que nos prometió y de que nos ha comprado para que seamos su pueblo. Hizo esto para darle gloria y alabanza.
Nos da el Señor el Sello de autenticidad, la garantía de nuestra salvación nos dice: "toma te doy de mi Espíritu como muestra de lo que vendrá de la salvación, de la vida eterna", y allá en la eternidad le daremos Gloria y honra.

Juan 7:38-39
38 El que cree en mí, como dice la escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
Si creemos en el Señor de nuestro interior fluye lo bueno, los buenos frutos, que El Espíritu Santo toma posesión de nuestras vidas, eso significa agua viva, agua viva es no pecar, vivir en santidad.

39 Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en Él; pues aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado.
Agua viva también es el Espíritu Santo, el cual se le daría a todo el que creyera en Él o el evangelio que es lo mismo; pero el Espíritu aún no había sido dado, porque Jesús todavía no había entrado en su gloria, no había ascendido.

Marcos 16:17-18
17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
Aquí nuevamente se refiere a los que creen en Jesucristo.

18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.
Estos son las bendiciones y los Dones que tendrán los que creen en Él.

En este pasaje vemos como el Apóstol Pablo impone las manos para bautizar a ciertos los discípulos; o sea que el Bautismo del Espíritu Santo también se puede recibir por imposición de manos.
Hechos 19:2-6
2 les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo.
Pablo se encontró con unos discípulos y les dijo: ¿recibieron el Espíritu Santo cuando creyeron? y ellos respondieron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo.

3 Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: En el bautismo de Juan.
¿Qué bautismo recibieron?, ellos respondieron: En el bautismo de Juan.

4 Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de Él, esto es, Jesús el Cristo.
Aquí resalta nuevamente el creer en Jesús, que es el que bautiza con Espíritu Santo y fuego (Mateo 3:11).
Cuando el Creyente es bautizado con el Espíritu Santo siente fuego en su ser, una calentura por diversas partes de su cuerpo, a eso se refería Juan, porque el Espíritu Santo es Fuego.

5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.
Este es el Bautismo en Agua, que puede hacerse antes o después de recibir el Espíritu Santo.

6 Y habiéndoles impuesto las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban.
Esta es la Señal o evidencia de haber recibido El Espíritu Santo, el Creyente empieza a hablar lenguas Angelicales.

2. Orando y Alabando
Como Segundo punto, el Espíritu Santo se recibe orando y Alabando al Señor de todo corazón, para eso debemos ser prudentes, insistentes, buscar ese avivamiento, entregarse en la alabanza para que venga el Espíritu Santo, buscando que venga a nuestras vidas para poder alumbrar como una lámpara, dar buenos frutos.

Mateo 25
Aquí en la Parábola de las diez vírgenes encontramos lo que debe hacer cada creyente para que venga o llenarse del Espíritu Santo; la luz de las lámparas son los frutos, el buen testimonio; el aceite es el Espíritu Santo.

8 Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan.
Las que no se esforzaron, las que se durmieron las que no se esforzaron.

9 Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas.
El Señor decía venid y compren sin dinero a todos los sedientos, vengan beban gratis (Isaías 55:1)
Un creyente invierte tiempo, dedicación, constancia, cordura, etc.
Las Insensatas iban a comprar o sea a volver a esforzarse.
Los que venden son los Pastores, Los Maestros, los ministros; ellos simbólicamente venden pero sin dinero, y las vírgenes tienen que comprar o tomar todas esas enseñanzas para aplicarlas a sus vidas, pero era un proceso.

Lucas 11:9-13 El Señor enseña que debemos pedir por lo Espiritual.
13 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?
Debemos pedir el Espíritu Santo en oración, es nuestro deber.

Con el Bautismo con el Espíritu Santo se cumple lo que el Señor decía: El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
O ríos de Aceite es lo mismo; Aceite = Espíritu Santo = Ríos de Agua viva.
Este creyente esforzado de su interior correrá ríos de agua viva será una fuente de Agua o Aceite que salte para vida eterna, tendrá abundancia, de sobra; decía en la palabra no necesitaran pedir prestado; sino, darán (Deuteronomio 28:12)

Efesios 5
18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
No emborracharse, sino llenarnos del Espíritu Santo.
El Apóstol relaciona de alguna manera aquí el emborracharse con ser lleno del Espíritu Santo, cuando alguien es lleno del Espíritu Santo, pareciera que estuviera borracho, porque por el avivamiento siente gozo, habla el lenguas y se siente un poco como en las nubes, ellos vivian esto, sabia lo que estaba diciendo.

19 hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;
Debemos Orar y Alabar para poder recibir el Espíritu Santo, búsqueda constante.

3. Obedecer las órdenes de Dios
Sabemos que las bendiciones se reciben por fe, y el que tiene fe obedece.

Hechos 5:32 Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.
Podemos ver que el Espíritu Santo es dado a los obedientes, a los que obedecen las órdenes del Señor.

Hechos 5:29 Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.
Si hay algo que los hombres nos manden que esté en contra de la voluntad de Dios, o de la palabra de Dios, es mejor obedecer a Dios primero.

Juan 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos
El Señor nos manda a cumplir los mandamientos.

16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Aquí dice que si obedecen (en cumplir sus mandamientos) el enviará al consolador, al Espíritu Santo; era una condición.

17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Muchos entienden que esta con vosotros, pero pocos entienden o ignoran que estará en vosotros, ósea morando en nosotros, dentro de nuestro corazón, y esta promesa es para todos los que le obedecen.

Lucas 24:49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.
Aquí el Señor habla de la promesa del Bautismo del Espíritu Santo, pero también les da una orden de que se queden en Jerusalén; hoy en día el Señor también nos habla y nos promete cosas hermosas pero también nos da ordenes, debemos prestar atención también a las órdenes, no solo a las promesas, porque éstas casi siempre son condicionales.

Hechos 1:4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí.
Aqui habla de la orden del Señor.

5 Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.
Aquí la promesa.

Hechos 1:8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.
Recibimos poder para vencer la carne, lo malo poder para tener dominio propio, y no llevarnos por vientos de doctrinas, estratagemas de hombres, porque estamos revestidos de poder.
(2 Timoteo 1:7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio).

Hechos 2:1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos.
La unanimidad es la obediencia, todos pensando, sintiendo, anhelando lo mismo lo espiritual, no es igual a estar juntos, la unanimidad es espiritual.

4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.
Esta fue la recompensa por estar unánimes, por la obediencia, aquí esta la venida del Espíritu Santo.

Sabemos que las bendiciones se alcanzar por obedecer, El Señor nos puede dar órdenes en profecía, en visiones o Sueños y debemos obedecer para que nos pueda dar el Espíritu Santo.

Recuerdo que el Señor me decía "Quita esas cosas de tu cabeza que impiden que yo te visite"

Era porque cuando venía a la alabanza, mi cuerpo estaba en la iglesia y mi mente estaba en otro lado, pensaba en otras cosas; en el trabajo, lo que tenia que hacer mañana, en lo que me pasaba, etc. no me estaba concentrando, tenia que estar concentrado para poder recibirlo, con todos los sentidos puestos en la alabanza, mi cuerpo y mi mente en la alabanza.
Cierto día en el día menos pensado, recuerdo que fue un sábado, después de un estudio bíblico empecé a alabar a Dios, y otra vez mi mente se estaba yendo a pensar en otras cosas como muchas veces me pasaba (luego entendí que eran ataques del enemigo) pero me acordé que el Señor me había dicho que quitara esas ideas de mi cabeza, y fue así como dije en mi mismo, mejor voy a pensar o imaginarme que estoy en el cielo adorando, cantando a Dios y que mi alrededor hay muchos Ángeles también adorando a Dios, pero yo soy el mas pequeñito ahí en un rincón, el Padre al frente en su trono sentado y así concentrado en esto, aplaudiendo con mucho fervor de pronto siento que por la parte de mi espalda entra un fuego y se posiciona en mi corazón y mi corazón ardía, y el fuego se iba extendiendo por algunas partes de mi cuerpo y en simultáneo se me enredó la lengua y empecé a hablar en otras lenguas, gloria a Dios, mi mente se despertó, me sentí ligero, experiencia inolvidable, no quería que terminara el culto, y supe que el Señor me había bautizado.

Así también usted lo puede recibir, obedeciendo las órdenes o mandamientos que el Señor le da, entregándose por completo en la alabanza, en cuerpo y mente.

A veces el Señor da el Espíritu Santo a personas recientes, conozco de un hermano que lo recibió el primer día que fue a la iglesia, luego de haber pasado un momento duro en su vida; el Señor puede hacer esto, que aun tiene sus errores y era nuevo, pero lo hace para ayudarlos a cambiar; pero son casos muy raros, generalmente lo hace cumpliendo estos 3 requisitos y esforzándonos.

También sé de testimonio de una persona que lo recibió en 20 años, otras de meses, otros de varios años así, este servidor lo recibió en poco más de dos años, no hay un tiempo determinado; lo puede recibir en sueños, orando, por imposición de manos; pero generalmente en la alabanza y adoración; el tiempo es de Dios, dependiendo de su búsqueda y entrega.

Lecciones aprendidas:

¿Como recibir el bautismo con el Espíritu Santo?

Creer en Jesucristo o en el Evangelio puro y completo.
Obedecer las órdenes o mandamientos del Señor.
Orando y Alabando.